Barckley encontró más tarde la prenda tirada aunque no tenía ninguna de sus pertenencias. Puso una denuncia ante la policía y solo decidió bloquear el dispositivo mediante el servicio Find My iPhone.
Al día siguiente se quedó sorprendido ya que recibió un e-mail de Apple anunciando una cita en la Genius Bar. Al parecer, como el dispositivo estaba bloqueado, el ladrón había pedido cita en la tienda para que le solucionasen el problema.
El Genius que le atendió asumió que el iPhone tenía fallos y sin más le dio un dispositivo completamente nuevo. Barckley llamó a la tienda para informar de que la persona que se había presentado no era él y propuso avisar a las autoridades del centro comercial, por desgracia obtuvo una respuesta negativa ya que la política de Apple indica que no se pueden entrometer en este tipo de situaciones.
Por suerte, Barckley pudo recuperar su iPhone ya que la policía intervino en el Apple Store antes de que fuera enviado al servicio técnico, aunque el ladrón disfruta ahora de un terminal totalmente nuevo.
La política de los empleados de Apple supone atender al cliente sin inmiscuirse en sus asuntos o encararse por sospechas prevaleciendo la seguridad del trabajador por encima de todo pero, ¿creéis que deberían implementar la seguridad en este tipo de transacciones con al menos un DNI o el ticket de compra?
Yo sí, y a pesar de que se sabe que el dispositivo está en garantía porque salió hace no mucho, sería bueno tener un comprobante para demostrar que es el verdadero dueño y no un ladrón o alguien que se lo ha encontrado. Los policías que llevaron el caso se quedaron muy sorprendidos por la falta de interés que demostró Apple.
Vía | Cult Of Mac
